ENTREVISTA AL PROFESOR

Nombre de la Entrevistada: Daniela Luco Hidalgo


La conversación tuvo lugar en la casa de mi entrevistada, ubicada en el Condominio los Naranjos, en la ciudad de El Belloto, Quilpue. Es un departamento muy bonito, con todas las comodidades, Daniela tiene 25 años y está recién casada. Realizó sus estudios de Profesora de Educación general básica, con mención en ingles, en la Universidad del Mar, egresando el año 2007 con distinción máxima. Actualmente, Daniela ejerce como profesora jefe de un cuarto año básico en la escuela particular – subvencionada “Little Home”, ubicada en la ciudad de Villa Alemana. Para comenzar a conversar e introducirme en la profesión y vocación de Daniela, le pregunto:

¿Por qué decidiste estudiar esta profesión?, ¿De dónde nace este sentimiento por educar?

Me cuenta que decidió estudiar esta carrera, básicamente, por que le gustan mucho los niños y cree que es una de las profesiones más enriquecedoras con la cual una persona se puede desarrollar. Siente, a su vez, que el sentimiento o vocación por educar empezó a surgir en ella cuando descubrió por primera vez la carrera de pedagogía, o sea desde muy niña, ya que la educación es para ella mucho más que transmitir conocimientos, es ser un modelo para los niños, una guía, un pilar, ya que el profesor debe inculcar valores y actitudes o hábitos a los niños y niñas.

Su experiencia de educación cuando pequeña fue bastante buena, relata que tuvo la suerte de encontrar profesores con real vocación durante su formación educacional. Me cuenta que su profesora que más recuerda se llamaba Isabel Maldonado y era muy preocupada de sus alumnos, una docente detallista y perfeccionista, además muy jugada por su grupo curso. Esta figura la marcó sin duda, a la hora de elegir la profesión para el resto de su vida.

Cuando egresó de la enseñanza media, no sabía muy bien que estudiar, probó con la carrera de administración de empresas hasta que, finalmente, se dio cuenta que la educación era lo suyo gracias a que siempre al ayudar a sus hermanas pequeñas a hacer las tareas y estudiar, sentía una gran satisfacción cuando éstas lograban sus objetivos y pasaban la prueba.

Al entrar a la universidad se dio cuenta lo fácil que se le hacía estudiar, ya que le gustaba la carrera y cada año que pasaba iba aprendiendo mucho más y se le hacía aún más fácil, porque se sentía feliz y realizada, y gracias a las prácticas tempranas en el aula, se iba reafirmando su vocación por la educación.

Finalmente, cuando comienza este año a ejercer, se da cuenta que estuvo bien la decisión que tomó y que, aunque está recién comenzando y siente que aún no está 100% realizada, cree que de todas maneras este es su rumbo y ha dado todo de sí para que los niños que están a su cargo aprendan cada día más.

Su mayor satisfacción es darse cuenta cómo sus alumnos aprenden y alcanzan los objetivos planteados en cada planificación y actividad de la clase, logrando relacionar lo conceptual con la realidad, llevando los conocimientos a la práctica. Son niños de 9 años, un grupo curso que tiene una diversidad de tipos de alumnos y aprendizajes variados, pero que por lo general son tranquilos. Sin embargo, hay dos niños que le han planteado una verdadera problemática, ya que son hiperactivos y muchas veces desordenan el ambiente del curso.

Su ambiente laboral también es un factor que influye a la hora de estar contenta en su trabajo, ya que menciona que es muy bueno, que los docentes se apoyan unos a otros para sacar adelante a estos niños de clase media y darles las máximas oportunidades posibles, todo enmarcado en un ambiente de apoyo mutuo entre todos los trabajadores del establecimiento, liderados por una directora muy comprometida con la labor, que se preocupa tanto de los alumnos como de sus profesores de aula.

Cree, que el profesor utópico, el excelente educador es aquel que es capaz de entregar a sus alumnos todo lo que está a su alcance, ya sea conocimientos como hábitos y valores, todo a través de una metodología contructivista y siempre llevando los conocimientos tanto conceptuales, procedimentales y actitudinales a la realidad del alumno.

Para finalizar, le pregunto ¿Cómo te proyectas a futuro como profesional?

Me dice que se proyecta siempre dedicada al área de la educación, pero especializándose en la orientación. Le gustaría seguir estudiando y perfeccionándose en este ámbito, ya que en este momento siente que falta mucho apoyo por parte de los padres y apoderados, por lo que los niños, generalmente, están muy solos en sus casas, sus padres están ausentes y nadie se preocupa, realmente, de seguir la educación impartida por la escuela. Por esta razón, tiene planeado estudiar un postgrado en educación infantil para así lograr ser jefa de la unidad técnica pedagógica y estar más cercana a los problemas reales y más cotidianos de los niños.